Por fin ha llegado el día que comienzo las
prácticas. Acudí al centro unos veinte minutos antes de la hora de entrada de
los alumnos que es a las 9:00, y acudí junto con mis dos primos mellizos que
van a quinto de primaria. Estábamos los tres emocionados y deseando de que nos
abrieran. Yo entré unos minutos antes que ellos y me recibió muy amablemente
Silvia, que resultó ser la profesora de quinto de primaria y mi tutora de
prácticas del centro escolar. Eso significaba que se me había asignado la clase
de quinto de primaria, ya que por motivos de precaución ahora no se rota de
aula durante las prácticas, sino que acompañaré a la misma clase durante todo
mi periodo de prácticas.
Mi clase asignada cuenta con 20 alumnos, 9
chicos y 11 chicas, que se encuentran agrupados en cinco grupos de cuatro para
fomentar el trabajo en equipo. Se llaman Equipos de superhéroes y
superheroínas, y cada uno tiene un nombre añadido que son: "Sigue las
direcciones", "mascarilla", "distancia de 1,5 metros",
"lávate las manos" y "gel desinfectante". Cuando acaba la
semana y todos los miembros de un grupo han realizado todas las tareas y han
hecho los deberes se les asigna un punto. Sin embargo, si algún miembro ha
fallado en alguna tarea, el equipo pierde el punto, creando así conciencia de
grupo.
También existen los premios individuales.
Por ejemplo, hoy dos alumnas han mejorado mucho en el desarrollo de una
redacción que tenían de deberes sobre la importancia que tiene leer y los
premios han consistido en un vale para cada una, uno de ellos permitía a la
alumna elaborar una pregunta para el próximo examen y el otro le libraba de
hacer los deberes un día.
Silvia, mi tutora, me habló de los tres
proyectos que se llevan a cabo en el centro: el proyecto de bilingüismo, la Ecoescuela para fomentar la lectura y el healthy eating sobre una buena
alimentación completa y equilibrada y el proyecto Steam.
También me enseñó la plataforma Educa, que
es la que siguen tanto alumnos como profesores y padres en todo el proceso
educativo.
El aula consta de pizarra de tiza y
pizarra digital. La colocación de los pupitres consiste en, como ya he dicho,
cinco grupos de cuatro alumnos, pero todos ellos guardan la distancia de
seguridad de 1,5 metros.
Uno de los alumnos tiene nivel de primero
de primaria y durante las clases suele hacer actividades diferentes.
A continuación, os enseño una foto que he
sacado al horario que tiene mi clase:
Como veis, a primera hora han tenido EF.
Durante ese tiempo, Silvia me ha estado informando sobre el centro y la clase.
Después, en inglés, han tenido un examen donde el alumno con nivel inferior se
ha ayudado de tarjetas con imágenes y texto asociado.
La letra R que aparece en amarillo en
algunas clases del horario significa que durante esas horas algunos alumnos se
van a otra clase donde harán refuerzo, es decir, harán las mismas actividades
que en la clase habitual pero de manera más individualizada para reforzar los
contenidos.
La letra S, se refiere al chico de quinto
que tiene nivel de primero y durante las horas marcadas con esa letra este
alumno se va con la profesora de PTE de apoyo para avanzar y reforzar.
Durante el recreo, las diferentes clases
tienen una zona asignada en el patio de la que no pueden salir acatando así las
normas de seguridad anti-Covid. Sin embargo, por motivos de espacio, quinto va
al patio que está comunicado con la iglesia y además mantienen entre los
alumnos en todo momento la distancia de 1,5 metros.
Durante el recreo Silvia me acompañó a la
Sala de profesores donde hemos tomado un pequeño tentempié y después hemos
vuelto con los chicos. Por cierto, nos limpiamos las manos con gel
hidroalcohólico frecuentemente pero antes y después del recreo es obligatorio
lavarse las manos con agua y jabón.
A las 14:00 se terminan las clases para
los chicos.
Los lunes, después de la salida de los
alumnos, los profesores tienen reunión de padres, normalmente de manera
digital, aunque a veces, como hoy, se hace presencial de manera excepcional.
Como el padre que estaba citado con mi tutora es familiar mío, me ha pedido que
le acompañe en la reunión así que he tenido la suerte de haber acudido a una
tutoría de padres en primera fila.
La mañana se me ha pasado volando y ya
estoy deseando volver mañana al colegio, aunque he salido con la cabeza
saturada de tanta información, pero cada vez me doy más cuenta de que este es
mi camino y que ser maestra es mi vocación.
